Sorbos que te sabrán a campo y harán tus besos más dulces
Todo el aroma del campo de Ibiza en la boca. Sorbo a sorbo. Tragos que ayudan a la digestión y atesoran el saber hacer de generaciones de familias. Romero. Hinojo. Hierbaluisa. Enebro. Aromas que nos llevan a la tierra y ésta, a sus gentes. Pruébalos. Y brinda por unas vacaciones repletas de la luz y la energía del Mediterráneo.
Santa Eulària des Riu es tierra de hierbas. De hecho, se considera a Sant Carles la parroquia con más tradición en la isla en la elaboración de este aromático licor. Una costumbre que se desarrolló especialmente tras el crecimiento de la producción de vino que se produjo hace dos siglos y que promovió la implementación de alambiques de cobre para crear destilados. Porque para elaborar las hierbas ibicencas sólo hace falta anís y un ramillete de hierbas aromáticas. Y tiempo. Ninguna copa de hierbas sabe igual a otra producida en casa ajena. Cada familia tiene su receta y su combinación. Ahora bien, en la fórmula de cada cual no suele faltar romero, ruda, enebro, salvia, romero, tomillo, hinojo, hierbaluisa y piel de limón. No dejes de probar nuestras aromáticas hierbas ibicencas. Y lo tienes muy fácil, pues en la mayoría de los restaurante tradicionales ofrecen tras la comida una copa o chupito como cortesía.
Pero hay más licores, quizás menos conocidos para el viajero aunque igual de tradicionales: la frígola y el palo. El primero, muy digestivo, se elabora con tomillo, una hierba con gran presencia tanto en el recetario de la isla como en los remedios naturales por sus propiedades antisépticas, fungicidas y antibacterianas. A diferencia de los dos licores ya mencionados, el palo no se bebe tras las comidas sino que habitualmente se disfruta como aperitivo, acompañado de hielo, rodaja de limón e, incluso, unas gotas de ginebra. Se obtiene por la extracción de aromas de la quina y la genciana, a los que se les añade azúcar caramelizado. ¿Te animas? Pruébalos y brinda por Ibiza.